El presente artículo busca ilustrar cómo el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha asumido cierta capacidad hegemónica para actuar como legislador, teniendo como premisa la ausencia de tal figura en la estructura y dinámica del Derecho Internacional. Así, basando sus acciones en el mandato de man- tenimiento de la paz y la seguridad internacional de la Carta de Naciones Unidas, el Consejo ha adoptado medidas de ese tipo bajo la lucha contra el terrorismo –por medio de las Resoluciones 1373 (2001) y 1540 (2004)–. Los efectos de tales acciones son analizados con dos raseros: legalidad vis-à-vis la Carta de Naciones Unidas y otras normas internacionales relevantes; y legitimidad, al confrontarlos con asuntos de accountability bajo la perspectiva de los que han sido denominados Rule of Law (Política Pública Internacional). Asumiendo que la acción del órgano de Naciones Unidas debe tener límites, se sugieren algunas propuestas y recomendaciones con el fin de mostrar la forma por la cual la Comunidad Internacional está enfocando su atención hacia la protección de principios y/o valores, como la autodeterminación, la democracia y la humanidad.